De viaje: 2013

Este año, debido a mi trabajo, tuvimos que esperar hasta noviembre y última hora para poner decidir las vacaciones (que novedad !). En fin, teníamos muchas ideas atractivas e interesantes, debido a que en estas fechas todo es más económico, quizás demasiadas. Además preferíamos decantarnos por algo difícil de repetir, o imposible de hacer en verano, y lo que gano fue : un transatlántico !!.

Resulta que entre finales de octubre y finales de noviembre, casi todos los cruceros de todas las compañías emigran del mediterráneo al Caribe, y entre marzo y mayo vuelven del Caribe, se les llama cruceros posicionales. Así pues, el coste de un crucero de este tipo que pueden ser de entre 14 y 21 días, es bajísimo en comparación con un crucero por el mediterráneo de 8 días en verano. La comparación por día/persona, podría ser perfectamente de 50 eur día/persona en un transatlántico en estas fechas con 100 eur día/persona en un crucero veraniego por el mediterráneo.

Así pues, como primera experiencia crucerística, compramos un crucero de Royal Caribbean para salir en 7 días !!, jeje. El crucero salía de Barcelona y llegaba a Galveston – Texas, 14 días más tarde. Para rematar el viaje, y ya que llegábamos el 24 de noviembre, decidimos vivir la experiencia del día de acción de gracias en estados unidos (Thanks given day, 27 de noviembre), pasando el día con unos primos de Lupita en Boston.

Crucero :

Al ser nuestro primero crucero, teníamos mucha ilusión, y grandes expectativas, sobretodo después de preguntar en algunos foros y leer un montón de historias sobre ellos. El único problema es que llevábamos 4 maletas !!, para llevar ropa de verano y ropa de pleno invierno para Boston.

El crucero no nos defraudó, y cumplió con creces las expectativas que teníamos. Es espectacular la organización que tienen, no se les escapa nada. Las distracciones a bordo son de los más variadas y entretenidas. El barco fue el “Navigator of the Seas” de la Royal Caribbean.

Solo una pega que podrían mejorar : todos los espectáculos, juegos y entretenimiento eran en inglés. Los espectáculos de las tardes/noches, eran la mayoría musicales, y no admiten crítica alguna, muy muy buenos, incluso hubo un imitador de voces que no vimos, y unos acróbatas muy buenos. El problema eran los juegos y entretenimientos, como trivial, concursos de parejas, etc. El tiempo pasa lento, puedes hacer muchas actividades o no hacer nada, tumbarte a tomar el sol, a leer un libro, a darte un bañito en la piscina o lo múltiples jacuzzis.

Sobre la comida, nada que reprochar, bastante buena, correcta y un servicio espectacular, sobre todo el del comedor de las cenas. La única pega, los horarios...cerraban muy temprano el buffet, pero con sus costumbres, es lo que hay.

Lo bueno es que se conoce a mucha gente (siempre que estés abierto a conocerla), sobretodo extranjera, ya que en este crucero, el 95% de gente eran norteamericanos, y de esos, el 95% de Texas (debido a que el puerto de destino era en Texas). En nuestro primera cena, nos asignaron a una mesa en la que había una pareja Texana, y dos hermanas Texanas también, pero de origen thailandes, ambas muy simpáticas. Para la tercera noche, pedimos el traslado de mesa a una en la que todas las parejas eran latinas (mexicanos y argentinos), y fue un acierto, ya que hicimos muy buena amistad con ellas.

Solo tuvimos 2 noches de “meneo” importante, tanto, que en la primera fue Lupita la que no durmió, y en la segunda fui yo el que me levanté y me quedé un buen rato en el sofá viendo la tele, ya que llegue a pasar miedo. Lupita, aprendida la lección, se tomó una pastilla para dormir, ya que el capitán ha había avisado que sería un día y noche moviditos “Motion in the ocean” como decía él, que gracioso !!. Curiosamente fueron los días de salida de Barcelona y ya dentro del Caribe. En el Atlántico la cosa fue aceptable, incluso algunos días perfectos. Como decía Lupita: “si estos gringos que llevan 200 cruceros cada uno están tranquilos, es que esto no se hunde”.

Houston y Nueva Inglaterra:

Llegamos a Houston y alquilamos un coche para movernos por Houston y visitar la NASA. De Houston poco vimos ya que estaba todo cerrado, hacía mal tiempo y hacía un frío horrible. Así que dimos una vuelta por la ciudad en coche, y acabamos yendo a la NASA. Tampoco nos encontramos nada especial, la verdad es que el centro de lanzamiento en Cabo Cañaveral es mucho más interesante.

Al día siguiente volábamos a Boston. Llegamos a las 4 de la tarde, alquilamos un coche, y decidimos salir de Boston en dirección Cape Cod, y dormir por el camino. Solo tuvimos un problema : usar el gps que nos dieron con el coche, ahhhhh !!!! entre que no sabía usarlo, y que no sabía como estaba el tema de autopistas en Boston, cuando preguntó si quería evitar las autopistas de peaje le dije que si, y nos dio una vuelta por todos los pueblos alrededor de Boston. Salimos del aeropuerto por el norte, fuimos hacia el oeste, y después hacia el Sur, hacia Cape Cod, muy divertido, de noche, y con caravana...

Total que conseguimos visitar Cape Cod al día siguiente. Muy bonito, pero tampoco tanto como nos habían dicho. De ahí volvimos hacia atrás, y fuimos dirección a Lowell, donde vive el primo de Lupita. Allí llegamos el miércoles por la tarde. Buscamos un hotelito por la zona, y nos fuimos a casa del primo Joe. Pasamos toda la tarde juntos e incluso ayudamos a preparar el famoso pastel de manzana americano “apple pie”. Al día siguiente visitamos un poquito Lowell, y de allí fuimos a casa de un cuñado del primo Joe a celebrar el ansiado “Thanks given day”. Pues bien, fue una comida familiar de lo más normal, en que siempre sirven el mismo tipo de comida, pavo, salsa de arándanos, salsa de esto, de lo otro, una especie de ensalada de coles de Bruselas, otra de maíz.. .en fin, así pasamos la tarde.

Los dos siguientes días, acabamos visitando Portland, Salem, algunos pueblitos y faros de la costa muy bonitos y Boston ciudad. La verdad es que ya estábamos cansados, y el tiempo hacía mella. La última noche la pasamos en un hotel espectacular comparado con el resto, en la zona de Cambridge, alejada del centro, pero con una parada del bus turístico al lado, y mucha zona libre para aparcar sin pagar (muy importante !!, los parquings públicos en Boston son carísimos).

Resumen:

Otro viaje inolvidable, pero para la próxima vez que hagamos un crucero, la visita extra intentaremos hacerla antes y no después, para descansar en el barco. Por el resto fue todo una experiencia recomendable 100% y que seguramente repetiremos.

De momento pongo algunas fotos, a falta de poner algún montaje en vídeo. Pinchar en las fotos para verlas más grandes.

Saliendo del puerto de Barcelona.

15 pisos tenia el barquito

Día de paella !!, jaja ,los cocineros dando una clase en directo para hacer paellas a los guiris.

En el tablón de anuncios del barco encontramos a un pareja de americanos que volvían de hacer el camino 1 mes andando, y buscaban afines, que casualidad ! a nosotros que somos repetidores !!, jeje.